Campanas extractoras: ¿por qué son esenciales para una cocina limpia y fresca?
Tener una campana extractora en la cocina es una gran inversión que trae muchos beneficios. El propósito de este artículo es explicar las ventajas de instalar una campana extractora para mejorar la calidad del aire, reducir olores y proteger las superficies en la cocina.
Una campana extractora es un dispositivo que se instala sobre la estufa o cocina y extrae el aire de la cocina hacia el exterior de la casa. Al extraer el humo, la grasa y los vapores mientras cocinas, una campana extractora puede hacer que respirar en la cocina sea más fácil y agradable. Además, ayuda a mantener las superficies y electrodomésticos limpios al eliminar las partículas de grasa suspendidas en el aire.
Mejora la calidad del aire
Instalar una campana extractora en la cocina mejora significativamente la calidad del aire al eliminar humo, vapor y olores generados durante la cocción.
Al cocinar, especialmente al freír o asar a altas temperaturas, se libera una gran cantidad de compuestos orgánicos volátiles (COVs) y partículas suspendidas en el aire. Muchos de estos compuestos son irritantes e incluso cancerígenos.
La campana extractora cuenta con filtros diseñados para capturar las pequeñas partículas de grasa y otros contaminantes. Además, el fuerte flujo de aire genera una corriente que succiona los vapores y humos calientes directamente desde la cocina. Esto evita la dispersión de estos contaminantes en toda la casa.
Una campana de alta eficiencia puede remover hasta el 95% de las partículas suspendidas en el aire. Esto genera un ambiente más limpio y saludable, especialmente para personas con afecciones respiratorias o alergias que son sensibles a estos contaminantes.
La acción constante de la campana también previene la acumulación de grasas y hollín en las paredes y muebles de la cocina. De esta forma se genera un ambiente más higiénico y se facilita la limpieza.
En conclusión, la campana extractora es esencial para eliminar los contaminantes generados durante la cocción y mejorar significativamente la calidad del aire dentro de la cocina y el resto de la casa.
Reduce el riesgo de incendio
Cocinar con aceite y grasa puede ser peligroso si no se maneja adecuadamente. Las cocinas causan alrededor del 40% de los incendios domésticos, según estadísticas de bomberos. Muchos de estos incendios comienzan cuando el aceite o la grasa se sobrecalienta y se enciende.
Una campana extractora puede reducir significativamente el riesgo de este tipo de incendios. Al encender la campana mientras cocinas, extrae el aire caliente y la grasa suspendida lejos de la estufa. Esto evita la acumulación de grasa en la cocina que podría prenderse fuego accidentalmente.
Las campanas extractoras están diseñadas específicamente para mover grandes volúmenes de aire caliente y grasoso. Su motor y conductos pueden extraer rápidamente los vapores inflamables antes de que se conviertan en un peligro. Mantienen el ambiente alrededor de la estufa más frío y menos propenso a contribuir a la propagación de las llamas.
Instalar una campana potente sobre tu estufa y usarla de manera consistente mientras cocinas puede marcar una gran diferencia en la seguridad de tu cocina. Reduce de manera significativa el riesgo de que pequeños fuegos de grasa se salgan de control. Es una sencilla pero muy efectiva manera de proteger tu hogar y tu familia.
Protege las superficies de la cocina
Una campana extractora protege las superficies de tu cocina al remover el vapor de agua generado durante la cocción. Este vapor, si no es extraído eficientemente, se condensa en las paredes, gabinetes y electrodomésticos, causando daños a largo plazo.
El vapor contiene grasa y residuos de comida que se adhieren a las superficies de la cocina. Con el tiempo, esto genera una capa pegajosa que es difícil de limpiar. Los gabinetes y electrodomésticos pueden comenzar a deteriorarse y las paredes pueden desarrollar moho.
Una campana extractora potente, instalada correctamente sobre la estufa, absorbe el vapor de agua caliente antes de que se propague por la cocina. El vapor es canalizado hacia el exterior de la vivienda a través de un ducto, manteniendo las superficies limpias y en buen estado.
Al proteger las paredes, gabinetes y electrodomésticos del daño causado por la condensación, una campana extractora prolonga la vida útil de estos elementos, evitando costosas reparaciones o reemplazos prematuros.
Mejora la visibilidad
Una campana extractora efectivamente remueve el vapor y humo que se genera durante el cocinado, mejorando significativamente la visibilidad en la cocina. Cuando se cocina, especialmente al freír o saltear, se libera mucho vapor de agua que rápidamente se esparce por el ambiente. Este vapor se acumula y condensa en superficies, cubriendo las ventanas, gabinetes e incluso el techo.
Una buena campana extractora, al succionar y expulsar el aire, evita que el vapor se acumule en la cocina. Esto permite ver claramente lo que se está cocinando, sin tener que abrir ventanas o limpiar superficies constantemente. Además, al mejorar la visibilidad se reducen los accidentes y se cocina de forma más segura.
En resumen, una campana extractora es esencial para tener una cocina con buena visibilidad. Su capacidad para atrapar y expulsar el vapor del cocinado hace una gran diferencia, manteniendo el ambiente despejado y permitiendo ver con claridad mientras se cocina.
Elimina olores
Una de las principales funciones de una campana extractora es eliminar los olores generados al cocinar. Al freír o saltear alimentos se liberan vapores y pequeñas partículas que contienen los aromas de la comida. Estos vapores con olor pueden impregnar las paredes, cortinas y muebles de la cocina e incluso expandirse al resto de la casa.
Una campana extractora cuenta con filtros que atrapan estas partículas y ventiladores que extraen el aire contaminado enviándolo al exterior de la vivienda. De esta forma se eliminan de raíz los malos olores en el origen, sin darles oportunidad de expandirse.
Los filtros son esenciales para bloquear las grasas y olores antes de que el aire sea expulsado. Existen filtros de aluminio, carbón activado y acero inoxidable. Los de carbón activado son los más efectivos para atrapar olores. Es importante cambiar los filtros periódicamente siguiendo las recomendaciones del fabricante para que funcionen correctamente.
Una campana potente con filtros de alta calidad puede eliminar prácticamente el 100% de los olores y vapores al cocinar. Esto evita que tu casa termine oliendo a comida por días enteros.
Tipos de campana extractora
Hay varios tipos de campanas extractoras para elegir, cada una con sus propias ventajas y desventajas:
De pared
Las campanas extractoras de pared son las más comunes y económicas. Se instalan contra la pared sobre la estufa. Son fáciles de instalar pero ocupan bastante espacio hacia afuera. También son algo ruidosas.
De isla
Las campanas de isla cuelgan del techo sobre una isla o península de cocina. Son modernas y estéticas, pero requieren un espacio abierto y techos altos. Son más caras y la instalación es más compleja.
Integradas
Las campanas integradas están ocultas dentro de los gabinetes sobre la estufa. Son discretas y ocupan menos espacio, aunque tienen menor poder de extracción de aire. Requieren una instalación profesional.
Downdraft
Las campanas downdraft se esconden debajo de la estufa y extraen los olores hacia abajo. Funcionan bien en espacios pequeños, pero tienen un poder limitado. Deben estar incorporadas en la encimera.
De filtro de carbón
Las campanas de filtro de carbón no requieren ductos de extracción. Filtran el aire y lo devuelven limpio a la cocina. Son fáciles de instalar pero los filtros deben cambiarse periódicamente.
En resumen, la elección de la campana depende del espacio, presupuesto y preferencias estéticas de cada cocina. Hay opciones eficientes para todo tipo de necesidad, ya sea minimalista, industrial o de alta gama.
Factores para elegir una campana
A la hora de elegir una campana extractora para tu cocina, hay varios factores importantes a considerar:
Tamaño de la campana: El tamaño de la campana debe corresponder al tamaño de tu cocina y específicamente de la estufa o área de cocción. Si la campana es muy pequeña no podrá extraer los olores y vapores de manera efectiva. Lo recomendable es que sea al menos tan ancha como la estufa.
Tipo de cocina: Si tienes una cocina abierta o de concepto abierto, es mejor optar por una campana de paredes o isla. Si la cocina está en un espacio cerrado, una campana de pared o chimenea puede ser más efectiva.
Capacidad de extracción: Verifica los metros cúbicos por hora de extracción de aire, entre mayor sea este número, más poderosa y efectiva será la campana.
Nivel de ruido: Las campanas potentes suelen ser un poco más ruidosas. Elige un modelo con un nivel de decibeles que no te resulte demasiado molesto.
Tipos de filtro: Los filtros de grasa son esenciales para limpiar el aire. Los de acero inoxidable son fáciles de limpiar y más duraderos. Otros como los de carbón activado ayudan a reducir olores.
Facilidad de mantenimiento: Opta por una campana que tenga filtros, bandejas y otras partes fáciles de quitar y limpiar. Que no requiera desarmar toda la campana.
Estilo y diseño: Escoge una campana que combine con el estilo y acabados de tu cocina. Hay distintos modelos, desde minimalistas hasta de acero inoxidable.
Funciones adicionales: Algunas campanas vienen con luces, controles digitales, temporizadores y más. Evalúa si requieres alguna función extra.
Presupuesto: Campanas extractoras hay en distintos rangos de precio. Fija un presupuesto y busca la mejor opción calidad-precio para tu cocina.
Instalación
La instalación de una campana extractora requiere conocimientos técnicos y herramientas específicas. Se recomienda contratar a un profesional para realizar este trabajo.
Sin embargo, aquí hay algunos consejos generales sobre el proceso de instalación:
Primero hay que medir el espacio disponible y elegir el tipo de campana extractora que mejor se adapte. Las campanas se clasifican en isla, pared, integrable, etc.
Luego hay que instalar el conducto de ventilación que llevará los olores y el aire al exterior. Esto requiere hacer un orificio en la pared o techo. El conducto debe tener el diámetro especificado por el fabricante.
Después se fija la campana al techo o pared utilizando soportes, tornillos y herramientas eléctricas. Debe quedar bien nivelada y sujeta firmemente.
Se conectan los conductos de ventilación de la campana al orificio de la pared o techo. Es importante sellar bien las uniones para evitar fugas.
También hay que conectar la campana a la corriente eléctrica, siguiendo las indicaciones del manual. Algunos modelos requieren conexión directa y otros utilizan enchufe.
Finalmente se prueba el funcionamiento de la campana, la iluminación y el nivel de ruido. Se deben solucionar posibles fugas en las conexiones de los conductos.
La instalación de la campana requiere de cuidado y precisión. Seguir las instrucciones del fabricante y contar con ayuda profesional asegurará un trabajo bien hecho.
Conclusión
Resumiendo, instalar una campana extractora en la cocina trae muchos beneficios. Ayuda a mejorar la calidad del aire, reduce el riesgo de incendios, protege las superficies y mejora la visibilidad mientras cocinamos. Además, elimina eficazmente los olores de la cocina.
Tener una campana extractora hace que cocinar sea una experiencia más segura, agradable y saludable. Los distintos modelos y funciones permiten elegir la que mejor se adapte a nuestras necesidades y presupuesto. La instalación es sencilla si seguimos las instrucciones del fabricante.
En definitiva, una campana extractora es una excelente inversión para cualquier cocina. Animo a todos los lectores a considerar instalar una, para disfrutar de sus numerosos beneficios diariamente. La diferencia en la calidad del ambiente de cocina antes y después es notable. ¡Merece la pena!